El periodista estaba escuchando a sus compañeros cuando de repente se escuchó el grito de él, y fue deslizando hasta terminar abajo. ¿El problema? Al parecer creyó que se le caía el café caliente encima.
Un camarógrafo, incluso, se asustó tanto de la situación que se metió en cuadro para socorrerlo. Finalmente, todo se trató sólo de un susto, porque Pagani se levantó, se acomodó y siguió como si nada.